Esta obra, realizada como parte de la construcción de la doble calzada de la autopista Bogotá–Girardot, tiene tiene 4.189 metros de longitud y dos carriles unidireccionales sentido Girardot–Bogotá, cada uno de 3.65 metros de ancho. Además posee franjas de seguridad internas y andenes laterales.
Para realizar el túnel se removieron 350 mil metros cúbicos de material y se empleó un sistema constructivo que siguió los lineamientos establecidos en el nuevo método austriaco NATM. En el proceso de recubrimiento se emplearon dos carros de encofrado que avanzaron por ambos frentes de forma hidráulica mediante rieles y permitieron hormigonar doce metros lineales al día.
La impermeabilización del túnel se realizó con geomembrana termosoldada, después de esto, el hormigón se bombeó desde mezcladoras de premezclado y vibrado directamente en el encofrado.
El trabajo se complementó con la instalación de acero de refuerzo, drenajes, hormigonado de la calzada y la colocación de los elementos prefabricados.
Este túnel ha sido clave para mejorar la movilidad de la vía y reducir los tiempos de desplazamiento de productos desde el centro del país hasta Buenaventura.




