La volumetría del edificio Ámbar impacta a primera vista por su audaz implantación en diagonal en el lote. Este gesto arquitectónico además de amplificar y crear alternativas de puntos de vista hacia el mar, logró una armónica relación con el entorno, contribuyendo de una manera importante  en el desarrollo urbanístico de la zona de Playa Salguero.

Los diseñadores se enfocaron en generar unas zonas sociales innovadoras, fue así como se creó un concepto multi-ambiente con más de 1200 m2: un ambiente zen que incluye un jardín natural con zona de juegos de niños, un ambiente lounge con zona de bar doble altura que incluye sistema de sonido envolvente y un ambiente skyline en último piso con zona húmeda.

En este proyecto se ha aplicado el sistema constructivo de placas y vigas postensadas. Para conocer las ventajas de este sistema, los constructores viajaron a ciudades costeras de Estados Unidos donde es una técnica común en la mayoría de edificios.

Con este sistema fue posible crear balcones delgados que fueron elementos clave para crear una imagen más estilizada del edificio.

El edificio incorpora el sistema de muros  termoacústicos Durapanel®, los cuales aportan un confort térmico importante en una ciudad de alta temperatura.

Otro elemento interesante de innovación es el tipo de barandas de los apartamentos, de la mano de la empresa Energía Solar S.A.,  dando como resultado una baranda de vidrio que cumple con las normas antisísmicas.

Las columnas de los primeros pisos son de 6.000 psi. En la actividad edificadora es vital contar con proveedores de alta confiabilidad, y específicamente en el tema de concreto y cemento, tener garantizada la calidad en todas las etapas del proyecto.