La planta Flandes está diseñada para proveer todos los productos de concreto de la compañía. Su configuración permite reducir los tiempos de ciclo de los camiones y generar mayor fluidez en los procesos, además cumple con las normativas de seguridad y cuidado ambiental de la industria.
El agua que se emplea en el proceso de producción se reutiliza en su totalidad, siguiendo así los lineamientos de la empresa que buscan hacer un uso más eficientes de los recursos y reducir el impacto ambiental de sus operaciones. Además, los silos de la planta tienen colectores de polvo y una capacidad de almacenamiento de 160 toneladas (100 de cemento y 60 de ceniza volante).
La planta dosificadora Koneko 40 tiene una capacidad de producción hora al mes de 5.500 metros cúbicos y fue fabricada en Colombia. El mezclado y transporte del concreto se realiza con mezcladoras de última generación e importadas de Estados Unidos, cada una con capacidad máxima de ocho metros cúbicos.
Por su parte, el laboratorio de calidad está dotado con equipos para realizar ensayos de acuerdo con la normativa colombiana NTC.