Si piensas en reformar tu vivienda, debes saber que, aunque ésta sea propia, en Colombia se deben cumplir con una serie de trámites o requisitos a la hora de intervenir ciertas áreas.
Conoce en este artículo lo que debes tener en cuenta para no cometer errores, que te pueden traer serias sanciones.
Antes de comenzar debes tener claro qué es lo que quieres hacer con tu vivienda, al definir el alcance de tu proyecto, tendrás claridad en cuanto a los pasos a seguir y los requerimientos necesarios para estos.
Tipos de intervenciones
Intervenciones menores o locativas: son aquellas que, por lo general, se realizan en el interior de las viviendas. Este tipo de intervenciones no implican cambios en la estructura.
Algunas de estas son:
- Pintura de paredes.
- Cambio de pisos
- Cambio de puertas y ventanas
- Reforma de cielorrasos o enchapes
- Reformas en la distribución de áreas
- Ampliación de redes de servicios.
Para las intervenciones menores o locativas, no es necesario solicitar ningún tipo de permiso, pero es importante tener en cuenta, a la hora de realizar reformas o cambios en la distribución de las áreas internas, que existen dos tipos de paredes:
- Tabiques o muros no estructurales: son paredes que permiten dividir o separar áreas dentro de la vivienda. Pueden ser tiradas o demolidas sin ningún tipo de riesgo para la estructura.
- Muros de carga: son paredes ubicadas en lugares estratégicos y que soportan la estructura. Este tipo de paredes no pueden ser intervenidas de ninguna manera, ya que podría afectar la estabilidad de la vivienda, al punto de causar un derrumbe.
Para definir qué tipo de pared vas a intervenir en tu proyecto, es importante que te asesores con un especialista en construcción que pueda revisar temas como espesor, sonido producido al golpear la estructura, composición y planos.
Intervenciones estructurales: este tipo de intervenciones, como su nombre lo indica, tienen que ver o afectan directamente la estructura de la vivienda.
Son reformas que se realizan a:
- Fachada
- Incremento en altura (nuevas losas).
- Mejoramiento de sismoresistencia.
- Ampliaciones.
- Realizar cerramientos.
- Demoliciones
Para realizar este tipo de reformas, es necesario contar con una licencia o permiso que se solicita ante la Curaduría Urbana.
Este permiso garantizará varias factores a la hora de realizar la intervención:
- La reforma no afectará las estructuras vecinas de la propiedad.
- En caso de afectar las estructuras vecinas, se garantiza que quien esté realizando la obra debe responder por los daños ocasionados.
- La reforma cumple con los reglamentos de propiedad horizontal.
- La reforma se adecua a las normas sobre servicios públicos domiciliarios.
Para mayor información sobre este trámite y sus requisitos conoce el Decreto 1077 de 2015, en el cual se estipulan los pasos a seguir para adquirir esta licencia.
Sin importar cuál sea tu tipo de reforma, recuerda siempre que en Argos estamos para ayudarte en la ejecución de tus proyectos y brindarte asesoría.